viernes, 1 de julio de 2016

Una sonrisa

Un reflejo de la felicidad.
Una luz.
Una invitación.
Demostrar al resto del mundo que aunque todo lo que te rodea sea una mierda pintada de purpurina siempre va a haber algo, por muy pequeño que sea, que no te pueden arrebatar y eso es por lo que yo pienso que la gente sonríe.
Fingir y luchar, un gesto facial y difícil de hacer verdaderamente ya que la mayoría son sonrisas falsas o de gente que no te importa. Una sonrisa es una milésima de segundo en el que te encuentras feliz.
Puede significar tantas cosas que no sé qué decir.
Expresión física que sirve para decir algo cuando sobran las palabras.
Puedes sonreír de felicidad, para hacer sentir bien a alguien, por picardía, por desesperación, por tristeza.....
Una sonrisa transforma una ofensa en ironía.
Acerca a un desconocido.
Hace sentir comprensión cuando es compartida.
Puede provocar rabia y enfado o puede enamorar perdidamente.
Es lo único que sabes expresar de forma natural desde que naces, es ajeno al aprendizaje, es lo único que eres capaz de sacar de alguien que no puede más.
Está bien, esta entrada estaba planeada desde navidades, pero mi año no ha sido fácil. "¿Qué es para ti una sonrisa?" o bien "¿qué puede conseguir una sonrisa?" fueron las preguntas que fui haciendo hace tiempo a varios contactos de Whatsapp y a completos desconocidos por la calle.
Recuerdo que yo me acercaba a ellos con mi mejor sonrisa y algunos no se paraban, algunos se disculpaban y se iban... Pero otros sonreían incómodos ante una pregunta tan complicada a pesar de su aparente sencillez. 
La mayoría dudaban al responderme y es que absolutamente todos sabemos sonreír, todos reconocemos una sonrisa, desde bebés. 
Hace poco iba en el metro y surgió uno de estos momentos incómodos en los que tienes la sensación de que te están mirando. Era un chico sentado enfrente. Yo en estos casos soy muy "si me miras, te miro y si no te gusta, deja de mirarme" y me quedé mirándole a los ojos tan fijamente como lo hacía él. En un instante se sorprendió de que le hubiera cazado mirándome y más aún de que le devolviera la mirada. Además yo tenía un día malo y me imagino la cara que debería de tener yo... La sorprendida fui yo cuando tras ese instante de asombro, se relajó y siguió mirándome a los ojos. Parecía una partida de ese juego que se llama "serio" (soy pésima con ese juego, siempre me río en la cara de mi oponente) y de un momento a otro, él sonrió. Aquello me descolocó. Una sonrisa pura, de diversión. Ese gesto facial, eso que a ese chico le supuso mover 13 músculos de su cara, mejoró mi día, me contagió parte de la felicidad que derrochaba esa sonrisa. 
Nadie sabría definir perfectamente la esencia de una sonrisa, pero creo que una sonrisa es algo por lo que dar gracias, siempre.
Lisístrata.